Rebecchi firmando el dibujo |
ARG: Noel Barrionuevo (PC)6', Carla Rebecchi (FG)31'; GB: Alex Danson (FG)65'
Argentina jugará por segunda vez en en la historia una final olímpica luego de su meritorio triunfo en la segunda semifinal ante Gran Bretaña por 2-1. Las Leonas mostraron todo su oficio para tomar la ventaja hoy y luego manejar el resultado ante un feroz rival. Excelente lo hecho por las trasandinas, que con un joven equipo pisarán la cancha del Riverbank Arena en el partido cúlmine. Doce años pasaron desde que el equipo dirigido por Cachito Vigil lograra la misma instancia en Sydney, marcando el capítulo inicial de una historia Leona, que promete no terminar.
Aun no se sacaban el nerviosismo ambos bandos cuando Josefina Sruoga consiguió el único corto que tendría Argentina en el partido. Seis minutos, la servida, la parada, el dragflick bajo de Barrionuevo, el pie izquierdo de la arquera Storry atornillado en el sintético y toc, sonaba el arco británico, para el primer gol argentino. Un corto guardado para los momentos importantes. Siguió la ansiedad en el medio, Gran Bretaña que quería, pero no tenía profundidad. La defensa albiceleste muy bien parada, combinaba con el medio y se buscaba mucho por las líneas laterales hasta el fondo británico. Aymar con espacios para progresar, ataba y desataba. Aunque las anfitrionas levantaban mucho sus líneas, Argentina salía muy bien por atrás, extremando en profundidad para el cambio de peso, variando siempre en cada salida. Mucha calma en las sudamericanas, que supieron esperar el momento para volver a romper la resistencia europea. Aymar en pase profundo por izquierda para Rebecchi, Carla que hace del palo un brazo para traerla hacia adentro, gana línea de fondo, amaga el centro atrás para engañar a la portera y vencerla, como en el rugby, por el lado ciego. En diez centímetros cuadrados, en el suelo y entre cuatro oponentes, la jugadora de Ciudad de BsAs sacó del sombrero el segundo, golazo de las Leonas a falta de 4' para el corte.
El complemento comenzó con una presión frenética de Gran Bretaña. Si antes Argentina lograba salir, ahora las europeas apretaban hasta con cinco jugadoras sobre las esquinas, sobre todo por el lado izquierdo de la salida argentina. Agobiante. Las penetraciones al semicírculo comenzaron a sucederse, hasta que se produjo el primer y único corto para las británicas. Crista Cullen apretó el gatillo, Maca Rodríguez que tapa en la salida. La pelota sin embargo se gastaba casi exclusivamente en el fondo argentino. Gran Bretaña no dejaba salir. Incursiones individuales o de a dos jugadoras, era la forma que tenían las trasandinas para llevar la pelota a terreno extranjero, pero no duraba mucho en la otra mitad. La defensa argentina siguió mostrando su prolijidad en la recuperación, pero no pudo con el gran descuento del equipo rojo. Cullen sirve un tiro libre a la T, Richardson que la controla en el fondo albiceleste, centra muy fuerte y el desvío excelente de Alex Danson. Descuento de las locales a falta de 5'. Por suerte, porque la olla aumentó de presión y el medio argentino no hilvanaba. Salvo algunas intercepciones de pelota sobre el final, que fueron mal manejadas por las delanteras argentinas. Pero llegaría el regresivo, el conteo oral y la brisa que se llevaba el sueño dorado de las anfitronas.
Tremendo triunfo de las Leonas, porque el trabajo fue mayor. Gran Bretaña vendió muy cara su derrota. Se viene la final esperada. Por fin, Holanda está ahí delante.
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