sábado, abril 14, 2012

Pakistán renueva Coach en las puertas de Londres

La selección masculina de Holanda caía por 1-2 en la semifinal de la Copa del Mundo ante Australia. Era marzo del 2010, en Nueva Delhi. Los naranjas volvían a fallar la final y su entrenador, Michel Van den Heuvel, daba un paso al costado.

Pasarían sólo tres meses para que el coach holandés se enrolara en un nuevo proyecto. La Selección masculina de Pakistán, apostaba por Van den Heuvel para que lo devolviera a la primera línea. Era el tercer entrenador extranjero que tendrían los Greenshirts, luego de Hans Jorritsma (1994) y Roelant Oltmans (2000).

La medalla de oro en los Juegos Asiáticos 2010 celebrados en Guangzhao, luego de 20 años, fue un suceso para el país asiático. Pakistán clasificaba a los Juegos Olímpicos de Londres dejando atrás a India, Malasia y Corea del Sur. Michel van den Heuvel encontraba su primer éxito y es así como lo celebraba.

Pero a poco andar, la pendiente se pondría cuesta arriba. Los jugadores pakistaníes no estaban acostumbrados a competir con jugadores y equipos que tuvieran estrategias y un plan de juego completamente diferentes. Quedó de manifiesto en el Champions Trophy de Nueva Zelanda 2011, donde Pakistán obtuvo el séptimo de los ocho lugares del escalafón. Quedó de manifiesto que se perdía la dirección hacia los objetivos. Sólo conseguiría redimirse siendo finalista de la Sultan Azlan Shah Cup donde caería estrechamente ante un joven equipo australiano.

Luego del éxito en la Copa Asia se produjo una baja en el rendimiento de jugadores clave de los Greenshirts. El creador Waeem Ahmed y el super dragflicker, Sohail Abbas no eran los mismos. Esa merma en la efectividad del corner corto pakistaní no pudo ser mejorada por otros ejecutantes. La capacidad goleadora estaba en juego.

El seleccionador además había contribuido a la incertidumbre, desestimando jugadores para luego reconvocarlos, rotando bastante al capitán a costa de estabilidad al interior del grupo. Encima, Shakeel Abbasi y Rehan Butt, convocados al proceso selectivo habían optado por irse a jugar a la Indian Hockey League, que no es reconocida por la FIH, exponiéndose éstos a sanciones.

Con todo, la Federación de Pakistán ha considerado una falta de rumbo en la dirección de Michel Van Den Heuvel y lo ha reemplazado por las anteriores estrellas olímpicas, Khawaja Junaid como técnico y Akhtar Rasool como coach de los Greenshirts, a cien días de que se encienda la antorcha a orillas del Támesis. Una jugada no menor.

Pero Pakistán tiene una fuente natural de jugadores. En cualquier momento se pueden juntar tres o cuatro jugadores desconocidos y descollar en una cita mundial. En los Juegos Olímpicos, difícilmente los Greenshirts podrán acceder a los primeros puestos, dado el alto nivel de otras selecciones. Pero terminar semifinalistas sería un gran premio para ellos.


¡Cómo sería volver a ver a los Greenshirts con rol protagónico!

No hay comentarios: