A principios de mayo, la mejor jugadora de todos los tiempos, Luciana Aymar, decidió dejar de defender la camiseta de su club, GEBA, para cuidarse con miras al que es su mayor anhelo: el Oro en Londres 2012.
La rodilla izquierda de Aymar arrastra una lesión crónica que no tiene cura. Su único cuidado es vía kinesiología. Con más de 300 TM en su vida y más de una década en el Hockey de primera línea, la articulación le pasa la cuenta a la Maga y con ello tiembla su rutina de aquí a los Juegos Olímpicos.
Luego del Panamericano de Rio 2007 la rodilla le hizo replantearse su carrera, pues estuvo al borde del retiro. Sin intervenirse quirúrgicamente, consiguió sobrepasar todas las vallas, Mundial 2010 incluído, hasta ahora. La superficie sintética la está matando y debe pensarse bien como seguir adelante.
Es por eso que ha dejado el club y se basará en los 3 torneos importantes que tienen las Leonas por delante: el Champions Trophy de Amsterdam en junio, los Panamericanos de Guadalajara en octubre y los Juegos Olímpicos de Londres 2012.
Tratamiento kinésico, analgésico y hielo es el menú que tiene preparado el equipo médico de las Leonas para llevar con Lucha a Londres bien parada. Porque Luciana Aymar no parará de exigirse dentro de la cancha para llegar de la mejor forma. Según Chapa Retegui, al Champions Trophy llegará 7 puntos, mientras que en los PanAm estará por los 10. A los 33 años, Aymar no puede dejar de pensar en otra cosa y se juega entera. Es que esa medalla alejaría la cima a todas. Si hoy nadie ha subido tan alto, con la de oro ya tocaría nubes.
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