Dejamos íntegra una columna escrita por la periodista argentina Laura Zeier. Así podemos sentir de cerca lo que significó el 4-Naciones de Mendoza para las Leonas y sus seguidoras.
Mucho y poco fue lo que dejó del Seleccionado Nacional de hockey sobre césped en tierras mendocinas. Miles de espectadores sacaron su entrada, formaron filas interminables y presenciaron el juego de “las mejores”, aunque en la final del torneo se vio más de una cara larga.
Un equipo consolidado, jovial y con un recambio importante de jugadoras remó cada partido del Cuatro Naciones como si fuera la final del mundo. Pero ésta vez sin Lucha Aymar ni Sole García y menos aún Ale Gulla.
Las Leonas lo disfrutaron, festejaron junto a la ovación de la gente cada gol de Barrionuevo, cada ingreso de la mendocina Marcela Casale, cada maniobra de Macarena Rodríguez y toda la estructura defensiva que encabezó Silvina D’ Elía en la última línea argentina.
¿Pero qué pasó? Se preguntaban los concurrentes. Simplemente no se previó que en el último corner corto de la final, Australia iba a sorprender. Y menos aún, que el gol de oro fuera al minuto de comenzado el alargue y de la misma forma que fue el empate.
No se evaluó quizá, la posibilidad de que los equipos se preparan continuamente, a nivel mundial, para equipararse a Argentina y de ahí “ver o evaluar” en qué posición del ranking internacional están. Y eso lo dejaron en claro los técnicos, en diferentes conferencias de prensa.
De todas formas, haber quedado en el intento no le quita el crédito, a la selección de Retegui, de revertir la situación ante el equipo oceánico el próximo miércoles en el Cuatro Naciones de Rosario. Allí podrán demostrar que la revancha vale y que Argentina es el mejor equipo del mundo.
En cuanto al evento deportivo, Mendoza es una provincia que, a nivel hockístico, ha crecido a pasos agigantados. Sumado a que, la Federación Argentina de la disciplina (con Marcellini a la cabeza) junto a la Asociación de Mendoza, trabajan cotidianamente para que el Estadio Ciudad de Godoy Cruz se llene una y otra vez de aficionados al deporte.
Lo sorprendente fue que en las tribunas no sólo se vio a gente del ambiente deportivo de Mendoza sino que cada vez son más los que se acercan con un solo objetivo: no importa si se sabe o no cuando es gol en el hockey, lo que importa es ver a las campeonas del mundo en el campo de juego. Otros se hacen presentes, por ejemplo, para conocer a Carla Rebecchi personalmente, otros quieren apreciar los colores celeste y blanco de la selección y así podría seguir enumerando.
Pero lo más importante es que la gente se acerca para alentar a éstas chicas que dieron tantas satisfacciones a nivel mundial y nos representan día tras día con el corazón y el mejor juego. De a poco, gracias a ellas son más los que quieren jugar y ser parte del hockey.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
Habría que volver a competir a Mendoza, como señala la periodista ellos han crecido mucho, porque no pensar en ir como club al apertura todos los años...... nuevamente.
pucha la Copa Libertadores fue un hito en el Hockey, era increíble
Publicar un comentario