PUNTA DEL ESTE.- En entrevista que dio a un diario local, Luciana Aymar cuenta lo que le sucede hoy, luego de la medalla dorada no obtenida y el reconocimiento mundial por su destacada carrera. Hoy disfruta el momento y se le nota.
"No es fácil asimilar esto; cuando empecé ni siquiera me imaginaba jugar en primera. Me acuerdo del esfuerzo que hacía viajando en colectivo desde Rosario a Buenos Aires... y hoy vivir esto es extraordinario. Pero no me quedo. Soy obsesiva y muy exigente conmigo y siempre vuelvo a encontrar motivaciones. Cada Mundial, cada Juego Olímpico o Champions Trophy lo vivo como si fuera el primero".
¿Cómo han sido esos 5 premios como mejor jugadora del mundo en 8 años?
"El primero de los premios (2001) me tomó por sorpresa. Yo era muy chica y creí que otras jugadoras se lo merecían más, pero este último lo disfruté más, ya que estoy llegando al final de mi carrera y sirve para demostrar que valió la pena tanto esfuerzo".
¿Qué te quitó el hockey?
Un montón. Yo tenía 18 años cuando empecé y con los viajes y esas cosas tuve que madurar más rápido que cualquier chica de mi edad, dejar de ver amigas. Me perdí casamientos de familiares y cosas que se pueden vivir una sola vez.
Con tantos años en la Selección, ¿qué te llevás de cada entrenador?
De Cachito Vigil, las enseñanzas. Es un estudioso y de él aprendí un montón. Llegó en un momento justo de mi carrera porque supo pulirme para que rindiera mejor. Minadeo ganó cosas importantes, pero hubo un desgaste con las más experimentadas y tuvo una salida entendible. Ojalá vuelva cuando ya no estemos las jugadoras de mi generación, porque es un buen entrenador. Y al Chapa Retegui lo admiraba de cuando estaba en actividad, porque siempre lo vi como un guerrero que dejaba todo. Lo suyo era la pasión y la entrega. Como técnico, por suerte, nos transmite los mismos valores.
¿Todavía sostienes que a tu carrera le quedan dos años?
Es la idea. En principio, pienso retirarme después del Mundial 2010. Pero no es definitivo. Una es consciente de que el cuerpo ya no le responde como a los 20 años, pero quizás en ese momento me encuentre bien y quiera seguir.
¿Qué le falta al hockey argentino?
Al femenino, por lo menos, que los clubes apoyen más a sus jugadoras para que las chicas no tengan que salir a buscar contratos afuera. Que no pase como con los hombres, que se van a jugar al exterior para hacer una mejor diferencia económica.
¿Qué te gustaría hacer después del retiro?
Algo relacionado con la TV. Podría ser la conducción de un programa de interés general y deportivo o bien la actuación. Un productor me dijo que podría andar bien en ficción. Pero no sé, ya se verá. Quiero fomentar la idea y darle para adelante, pero no improvisar. Me gusta llegar bien preparada.
Luciana Aymar, un ejemplo de dedicación por un ideal. Una jugadora que se juega en cada entrenamiento por estar a tope y bien le ha valido su esfuerzo: es 5 veces la Mejor del Mundo, el mismo record que alcanzó su compatriota Juan Manuel Fangio en la Fórmula 1, Simplemente Impresionante.
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